Cuando enseñamos a nuestros hijos a montar bicicleta, desde el primer paso destacamos la importancia de la seguridad, ya que los accidentes suelen ocurrir repetidamente en los pedaleos iniciales. En algunos casos son más necesarios que en otros y todo dependerá de la edad del menor. Hoy te diremos la importancia de los cascos de bicicleta para niños desde los 9 meses hasta los 2 años.
Un casco de bebés y niños pequeños es un plus de seguridad. Las asociaciones médicas recomiendan su uso debido a que la mayoría de lesiones graves por caídas desde una bici se produce a raíz de golpes en la cabeza. Para los bebés y niños pequeños hay condiciones que considerar al momento de comprar un buen casco: Su cabeza no es muy grande y su cuello no está del todo fortalecido.
Por eso hoy te diremos cómo elegir el mejor.
Elije un buen casco de bebés y niños pequeños
Los cascos para niños están diseñados para ajustar de manera perfecta el tamaño de sus cabezas, que por supuesto, es más chica. El estilo es más compacto y con mayor protección. Los diseños son muy coloridos con el propósito de llamar la atención del menor, por lo que querrá cargarlo con él en todo momento.
Sin importar si se trata de casco de bici para niños de 2 años o un casco de bici para bebé de 9 meses, los aspectos que debes considerar no cambian, así que presta atención a las características de un buen protector de cabeza.
1. Talla y tamaño
Lo principal es saber elegir el tamaño del casco. Debe cubrir la cabeza correctamente para que cumpla con su función. Mide el perímetro craneal sobre las orejas del niño con una cinta métrica, así conocerás la medida exacta.
Luego de conocer la talla, debes buscar un casco con el tamaño ideal. Esto quiere decir un centímetro más grande que la cabeza del pequeño para que se ajuste de manera correcta.
2. Diseño y color
Como ya mencionamos, el diseño debe ser muy llamativo o colorido. La intención es que el niño sienta el deseo de colocárselo.
Pero también es importante que se trate de colores que sean notables a la vista en plena vía, así las personas distinguen al conductor.
3. Ventilación
Las series en línea y agujeros que se ubican en la superficie del casco son las que permiten una ventilación adecuada. Ayudan a disminuir la temperatura en la cabeza y concentración de humedad. Considera que el niño tendrá ganas de pasear, mayormente, en verano.
4. Comodidad
La comodidad del niño es un punto fundamental no solo al montar la bicicleta, también al utilizar el casco. Muchos cascos dispones de almohadillas interiores con doble función.
Ayuda al rebote de la cabeza y al mismo tiempo se utiliza para cambiar de talla a medida que el menor crezca. Si adquiere un casco de bici para bebé de 9 meses, fácilmente puede tener el mismo casco de bici para niño de 2 años, con solo cambiar las almohadillas.
5. Certificación
Con la seguridad no se juega, mucho menos si se trata de niños, así que es importantísimo que los cascos infantiles, tanto como los de adultos, cuenten con la certificación adecuada que les permita distribuir correctamente los impactos.
Ten en cuenta que la fuerza soportada por este tipo de elementos es de hasta 35 km/h. Si ocurre un accidente por debajo de esta velocidad, la espuma dentro del casco no se deteriora, así sabrás si realmente es un producto que cuenta con la certificación necesaria para ser el mejor casco de bicicleta para niños.